Receta de Crostini de Pane Carasau con Rasco y Miel
Receta sarda: Crostinis de pan carasau con queso rasco y miel. Un tentempié sardo auténtico y rápido donde el queso rasco se funde delicadamente sobre el crujiente pan carasau, realzado por la dulzura de la miel de castaño. Una combinación perfecta de sabores para deleitar a sus invitados.
Toma las hojas de pane carasau y córtalas en trozos grandes, manteniendo un tamaño adecuado para servirlas como crostini.
Corta el queso rasco en rodajas finas, tratando de cubrir cada trozo de pan con una cantidad generosa de queso.
Precalienta el horno a 200 grados Celsius.
Coloca los crostini en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino, asegurándote de que el queso esté distribuido uniformemente.
Hornea los crostini y déjalos cocinar hasta que el queso rasco esté completamente derretido y ligeramente dorado, creando un contraste crujiente con la base del pane carasau.
Mientras tanto, calienta suavemente la miel de corbezzolo en una cacerola o en el microondas hasta que esté fluida y fácil de verter.
Saca los crostini del horno y vierte inmediatamente un hilo de miel caliente sobre cada uno, distribuyéndolo uniformemente para mezclar los sabores.
Sirve los crostini calientes para apreciar la fusión del sabor intenso del queso rasco y la dulzura única de la miel de corbezzolo.
Notas
Para agregar un toque único a la receta, puedes adornar cada crostini con una pizca de romero fresco picado o cebollino antes de hornear, para introducir un elemento aromático que se combina bien con la dulzura de la miel y la intensidad del queso.